Jose

Me subías a la mesa de la cocina, te separabas un poquito, estirabas los brazos y me decías: "Vamos mi chica" Me lanzaba encantada a tus brazos... volvías a hacer lo mismo cada vez desde un poquito más lejos...me lo pensaba pero sabía que siempre estaban tus brazos esperándome y que no me dejarías caer.

Recuerdo mis nervios cuando me obligaste a acercar el dedo al pico del canario... le tenía terror!!! y me hizo cosquillitas...

La habitación de tu piso llena de jaulas...

Los paquetes de regaliz rojo que comprabas a la Toñi.

La de veces que he ido a pintar la fachada de la casa de Loira y siempre aparecían restos de aquella pintura que utilizasteis Joxe Cruz y tú aquel verano que tu amigo "enamoró" a la tía Carmen.

Tu casa en Santander...

Tu letra... la letra más bonita del mundo... nunca he visto nada parecido.

Cuando me hiciste miembra del club de canaricultura... (Me sentí importantísima)

Esas conversaciones en Loira y en Vigo cuando me venías a visitar. Me gustaba escucharte, sabía que eras un loco, un buscador de algo, un soñador con los pies a veces lejos del suelo... Muchas veces.

¿Incomprendido? claro... Era dificil entenderte, a mí me gustabas... solo te disfruté, poquito, pero lo hice.

Te quedaste dormidito, no molestaste... Recuerdo la entereza de Arkaitz y la pena de Manuel cuando lo supo, le encantaban tus visitas, aún tiene todos tus dibujos colgados de la pared y yo no soy capaz de quitar tu teléfono del movil...

Hoy es San José... no eras santo y nos sobra la tilde...