lunes, 10 de febrero de 2014
Lunes
Es lunes, no trabajo, es día para descansar y organizar la semana. Normalmente me gustan mis lunes.
Una extracción de sangre a las nueve de la mañana no es buen modo de comenzar. Salir de casa sin desayunar es malo, tener que subir una cuesta hasta el lugar en el que te van a maltratar, con la barriga suplicando sustento es peor y que por el camino te llamen cobarde por temer a las agujas ya es la leche.
Llegas al lugar, coges número como en la carnicería, pero en este caso en la tabla estás tú. Miras a tus probables verdugos, son cuatro, dos de ellos tienen pinta de haber pinchado ayer por primera vez, ¡¡porras!! es lunes, hoy es su primer día... NO te agobies, seguro que tienen buena mano, no tiene por qué pasar, hace años que no te generan ningún desastre en la vena, seguro que tienes la suerte del tonto que le llamo yo y son buenísimos en este "noble arte".
Buenos días, qué brazo te doy? El que quieras, me dice... mal vamos, ninguno pues, tampoco hay que ser muy listo para saber que no voy a querer poner ninguno en esa especie de guillotina.
Me rindo, le acerco una de mis extremidades e inmediatamente giro la cabeza, no quiero ver. Derecha, el brazo ya perforado de un abuelo con cara de pocos amigos... izquierda, una desmayada en la camilla... el techo muy bonito!!
Al tipo le da la risa cuando le protesto por no dejarme desayunar, nada de este malestar me acudiría si mi yogur llenito de semillas estuviese en mi panza y encima el muy mendrugo me dice que me ha hecho daño porque tengo la piel muy fina. Yo no sé de donde ha sacado esa idea, yo no he hecho el más mínimo aspaviento cuando esa taladradora ha perforado mi bracito, solo mi ombligo se ha dado cuenta de que algo pasaba escondido detrás de mi columna vertebral.
Ya está, me dice el muy mentiroso, aún queda meter y sacar dos millones de tubos con el consiguiente triple salto mortal de mi pobre ombliguiño que ya tutea a las vértebras.
Esto fue a las nueve, son las doce y media... es posible que el esparadrapo que tengo en el brazo me acompañe hasta la noche... Una de las tareas que realizo en el lugar al que acudo por dinero es arrancar pelos, pero los míos me duelen y ya que me han acusado de falta de valor, no vamos a contradecir a nadie.
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Obviamente
La consigna era clara: Me voy a dejar la vida, obviamente no voy a aprobar. No recuerdo quien comenzaba la conversación, recuerdo el día d...
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Me lo habían contado, no es que desconfiase de la persona pero son de estas cosas que mejor ver...LLegué a Melide con la lengua fuera y bu...
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Que tu madre quê??que por suspender te ha castigado llevándote a una escuela de baile??? Tu madre es la puta ama!!!!! Eso le dijo una ...
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