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Tejieron una red protectora hace bastantes años alrededor de mi pequeña familia y jamás ha habido una sola fisura. No deja de sorprenderme la capacidad de estas personas para cubrirnos cual gallina sin hacerlo notar.

Tras una llamada mía nos adoptaron, a cada uno por su lado, al principio sin saber muy bien como actuar, sorprendiendose cada día con nuestro peculiar comportamiento, respetandolo pero sin dejar de proteger desde el más infinito respeto.

Cuántas horas de conversaciones, de casi monólogos gracias a los que he calmado mi alma con su comprensión, sabiendo que la había para mí y para quien me preocupaba, a partes iguales o inclinandose hacia el lado que más lo necesitaba en cada momento.

Mis chicos y yo hemos pasado el día con ellos. Son mágicos... nos roban carcajadas sin parar y nos regalan la intimidad de su familia sin ningún pudor. Nos introducen en su núcleo si pedir absolutamente nada, solo regalando...

Hoy uno de nuestros motivos de carcajada ha sido este BUQUE DE ASALTO ANFÍBIO, el mayor buque en tamaño y tonelaje de la armada española en su historia, según la Wiki. Se ha pasado la mañana entrando y saliendo de la ría como si fuese un barquito en una bañera mientras mi primo preparaba el churrasco con las enormes gafas de sol de su hija puestas para evitar el humo...

Solo somos primos lejanos, pero es por goleada mi primo favorito aunque me llame feminista. Y su mujer... aún llora a mi madre y a mi me la recuerda con su elegancia y su dificultad para abrazar. Os quiero, sin duda.