Cambio de rumbo

Seis y media de la madrugada.

El cansancio ha podido conmigo esta noche y cuando tu compañero de habitación ha conseguido descansar en silencio, yo he hecho lo mismo. El sonido de tu fuerte y tranquila respiración me ha mecido.
Días de nervios, lágrimas incontroladas, carcajadas incomprensibles y reparadoras. Días de cama rodeada, de besos, de caricias, de recuerdos, de muchos recuerdos. Impotencia, cariño, soledad, confusión, paz.
Días en los que te he pedido que durmieses para después poder ir a pescar juntos. A veces con una lágrima silenciosa resbalando sin que la vieses, otras con más bríos acompañada la propuesta con alguna tontería que me ayude a asimilar que te estoy pidiendo que te mueras al fin y al cabo, eso sí, disfrazandolo para los dos.

Hace dos meses de ésto que escribí, te quedaste sólo unas horitas más y ya por fin descansaste.

Hoy he felicitado a Chus por su cumpleaños, como siempre con un día de retraso. Está bien, siempre pensé que después de dedicarle tantos años a cuidarte cuando faltases se nos caería ella, tu hija preferida, como nos gustaba llamarla para meternos con vosotros, pero no, parece estar bien y tranquila. Buen trabajo de tus hijas mayores y abnegado por parte de ella.

Yo escribo por aquí, lo público y mi gente sabe lo que siento. Para mi es sano hacerlo, me concilia conmigo y con mis sentimientos. Hace poco anduve cerca de mi pueblo,ese en el que viviste tanto, no llegué a él. He puesto una especie de barrera, de repente ya descansamos y necesito un tiempo para llegar allí y que no estés, variar el rumbo. Del resto todo es tranquilidad y buenas sensaciones, lo hiciste tan bien...

Por cierto aita, tengo una urna biodegradable vacía en tu casa de Loira,  no tengo estanterías donde ponerla,  si la pongo fuera de maceta se me desintegrará con la lluvia y en la cocina no la voy a poner. ¿alguna idea? Es que ya le he cogido cariño! !